Crisálida

“Siempre imaginé que el Paraíso sería algún tipo de biblioteca” 

Jorge Luis Borges

Por eso me encanta Borges!!! Su definición de paraíso es simple; vamos y nos sumergimos en creaciones... en espejos de la realidad, en historia, en arte, en páginas amarillas con algo de tinta, en algunos bosquejos, en los lomos antiguos y en las ediciones modernas; en ideas que se apoyan y otras que se contraponen para generar el debate, la discusión, el pensamiento de la opinión; y que no te saquen de allí!!! Me voy, me voy ahora a mi pequeño paraíso a leer, a sumergirme en un libro, a disfrutar de ese momento en que todo lo que está alrededor no sucede; se siente el libro, el papel y las letras susurrando... disfrutando de la lectura en verdad... sin tomar los tiempos, sin contar las páginas que faltan... sin saber dónde inicia, ni dónde acaba. 

Los libros son para muchas cosas y se toman por diversas razones. Algunos precisan el estar feliz para no caer ante ellos, otros precisan calma, algunos de música para llevar el ritmo, algunos de paciencia y otros de energía... tomar un libro en el tiempo que se debe o encontrar la forma de adaptar el ambiente para disfrutar del mismo, es todo un arte. 

Los libros son como un poco del alma de cada autor, cada escrito refleja ese espejo al alma a veces muy natural, a veces muy metafórico, a veces muy superficial o a veces completamente filosófico. No hay libro difícil, ni libro fácil, no hay lector experimentado, ni lector novato, hay libros y hay lectores; y claro hay amor por los libros, por la lectura por las letras....

Un libro requiere de cierta pasión... aún se me hace difícil leer algo sobre el computador, necesito las páginas, sentir las letras, tomar un lápiz y tal vez apuntar algo, sentir en el bolso que llevo el peso de mi lectura... que me acompaña, que está allí siempre como diciéndome: tómame, no me olvides entre tus deberes... tu vida cotidiana. Entonces disfruta de un momento, busca un buen lugar... con luz, con aire fresco... con el silencio del universo (no hay tal silencio) y abre un libro... lee ligero... entrégate a la páginas, luego.... haz una pausa; si puedes, dibuja lo que ves, da el tiempo a tu imaginación de crear... de ser... entonces sigue, pero no sobre las líneas, sigue a través de ellas...